Bridgewater, Nueva Jersey, 7 de junio de 2025.– La relación entre el presidente Donald Trump y el empresario Elon Musk llegó a un punto de ruptura este fin de semana, luego de que el mandatario advirtiera públicamente sobre posibles represalias si el CEO de Tesla y SpaceX decide respaldar a candidatos demócratas en las elecciones legislativas de 2026.
En una entrevista telefónica con la cadena NBC, Trump fue tajante al declarar que no tiene intención de reconciliarse con Musk y sugirió que el magnate podría enfrentar “graves consecuencias” si opta por aliarse con la oposición. “Supongo que sí, claro”, respondió Trump cuando se le preguntó si la relación estaba terminada. Añadió que durante su primer mandato le ofreció varias oportunidades a Musk y que ahora está enfocado en “otras cosas”.
El conflicto se intensificó luego de que Musk calificara como “abominación repugnante” un nuevo proyecto de ley impulsado por Trump en el Capitolio, el cual propone extender recortes fiscales implementados durante su primer mandato. Musk advirtió que dicha iniciativa podría disparar el déficit federal.
Desde entonces, ambos personajes han intercambiado ataques en redes sociales. Musk incluso acusó al presidente de encubrir vínculos con el pedófilo Jeffrey Epstein, alegaciones que posteriormente eliminó. En respuesta, Trump sugirió que podría revisar los contratos federales que actualmente benefician a empresas como Starlink, Tesla y SpaceX.
El vicepresidente JD Vance intentó suavizar la situación durante una entrevista, calificando a Musk como “un tipo emocional” que cometió un error al lanzar ataques contra Trump, aunque también afirmó que el mandatario ha actuado con “contención” y no busca un conflicto prolongado.
A pesar de los intentos de otros republicanos por promover una reconciliación, la tensión entre ambos continúa escalando. La Casa Blanca y líderes del Partido Republicano monitorean de cerca el impacto que este distanciamiento podría tener en los sectores tecnológicos, empresariales y electorales.
Mientras tanto, el Congreso evalúa el proyecto de ley señalado por Musk. De ser aprobado, podría dejar sin cobertura médica a casi 11 millones de personas y elevar el déficit nacional en más de 2.4 billones de dólares en la próxima década, de acuerdo con estimaciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés).