La Organización Internacional del Trabajo estimó que las restricciones a los negocios y la vida pública borraron el 8,8% de todas las horas de trabajo en todo el mundo el año pasado.
Desde el inicio de las medidas de aislamiento social a finales de marzo, el país ha perdido alrededor un millón de empleos formales y un número indeterminado de trabajos informales que representan casi la mitad de la fuerza laboral del país.