La primera alcaldesa de Tijuana, -y ojo con que no se adjuntó la palabra “electa”, porque entre egos de mujeres, hasta quién fue la primera mujer en ser la cabeza de uno de los municipios más violentos se andan disputando, en fin- Karla Patricia Ruiz Macfarland ¿Dónde quedó? y la mejor pregunta ¿Qué nos dejó?, vaya que tuvo un gobierno atropellado, sin cabeza, sin fuerza y sobre todo sin estructura. No se pone en duda las buenas intenciones de la hija del Fiscal del Estado de Baja California, pero el dicho de “la intención es lo que cuenta” no aplica en las labores de encabezar dignamente y a favor de los ciudadanos, un municipio que requiere más que bonitas poses, agradecimientos y eventos que no traen un beneficio visible para los tijuanenses.
¿Será que a la muy siempre conmovida presidenta se la comieron viva los ya colmilludos políticos que la asesoraban? Preciso una solicitud para que cada ciudadano verifique a los amigos y familiares que lo asesorarán en su mandado, esto “porsi” un día toca la suerte que de un día a otro se convierta cualesquiera en el primer edil, de igual forma preciso aclarar que esto no va dirigido al gobierno de la primera alcaldesa electa de la ciudad de Tijuana, Montserrat Caballero, que se sabe que a la primer familia que decidió apoyar fue la suya.
La tan amante de la región CaliBaja al ser despojada una vez más del gobierno por el político, González Cruz, abandonó a los ciudadanos, no sin antes dejar una misiva de agradecimiento donde incita a la paz y unidad, esperemos que con esta carta los ciudadanos de la frontera más visitada de México queden conformes y en la espera de la buena voluntad e intenciones del gobierno predecesor.