Por la redacción de Garabato.info | 21 de mayo de 2025
Con más de dos décadas de distancia desde su estreno original, Lilo & Stitch regresa en forma de live action, bajo la enorme expectativa que implica tocar una de las historias más queridas (y también más subestimadas) del catálogo animado de Disney. En Garabato.info tuvimos la oportunidad de ver la cinta antes de su estreno comercial, y el balance es claro: es una buena película, pero no una obra inolvidable.
Una historia que conserva la forma, pero no toda el alma
La dirección apuesta por una recreación fiel, tanto en atmósfera como en narrativa. La historia se mantiene: una niña solitaria en Hawái encuentra en un experimento alienígena fugitivo al amigo más inesperado, en una historia que combina acción, ternura y temas familiares.
Pero hay algo que no termina de conectar. Puede ser el ritmo, tal vez ciertos momentos que se sienten mecánicos, o simplemente que esta adaptación pierde parte del “caos encantador” del filme animado de 2002. Hay nostalgia, pero falta chispa.
Maia Kealoha destaca como Lilo, y Stitch es visualmente encantador
Lo que sí funciona muy bien es el elenco. Maia Kealoha, en su debut como Lilo, entrega una actuación natural, convincente y emocional. La química con Stitch (una creación digital sólida, expresiva y bien integrada al entorno) mantiene a flote los momentos más sensibles. Sydney Agudong, como Nani, cumple, aunque su elección de casting generó controversia en redes sociales por temas de representación.

Ambientación hawaiana, música y humor: un homenaje cuidado
La ambientación es uno de los grandes aciertos del filme. La música tradicional hawaiana, sumada a paisajes naturales y efectos bien logrados, recrean el espíritu isleño que marcó la versión animada. Hay humor, hay ternura, y sí, hay “ohana”.
¿Vale la pena verla?
Definitivamente. Es una propuesta pensada para las nuevas generaciones que apenas conocerán a Stitch, pero también funciona como vehículo nostálgico para quienes crecieron con él. A pesar de que no todos los momentos brillan, y de que algunos sentirán que le falta “algo” intangible, el resultado final es disfrutable. Date una idea con este trailer: