Actualmente es de suma importancia hablar con los niños sobre el duelo, la pérdida de algo o alguien; recordemos que tanto adultos como niños sufrimos irreparables pérdidas durante el año 2020, lo cual alteró el mundo al cual estábamos acostumbrados.
La pérdida de la libertad, de salir a la escuela, de ver a los compañeros, de salir a jugar, incluso algunos perdieron a su padre, su madre, algún abuelo, abuela, tío, tía, amigos, etc., y si esto ha sido muy difícil de enfrentar en los adultos, ahora imaginemos a los niños y niñas, cómo se sienten al vivir esas pérdidas.
Es importante y estamos a tiempo de ayudarlos a vivir el duelo de acuerdo a su edad, de comprender cómo ve las cosas, así como cambió el mundo a los adultos, así mismo les cambió a ellos.
Poco a poco están volviendo a un mundo nuevo, una nueva normalidad, donde habrá más ausencias, donde no estarán personas que conocían antes del 2020.
El duelo es distinto en los niños y en adultos.
Las fases del proceso pueden ser similares, negación, ira, negociación, depresión y aceptación, en cambio la manera de manifestarlas cambia con la edad, incluso en la infancia el duelo puede ser distinto dependiendo la etapa de vida en la que se encuentra el pequeño.
El duelo es un proceso caracterizado por un conjunto de representaciones mentales, emociones y comportamientos vinculadas a una pérdida efectiva dependiendo de su edad.
Cómo se le puede ayudar
Los bebés y niños pequeños no entienden la muerte, pero pueden percibir lo que siente la persona que los cuida, mantenga intactas tantas rutinas como le sea posible.
La rutina es una fuerza de protección para los niños en medio de grandes trastornos, evite la separación física y ofrezca una atención física adicional para consolar a su hijo y dar más seguridad.
Los niños en edad preescolar perciben la muerte como algo temporal, y su idea errónea generalmente es reforzada por los dibujos animados que vuelven a la vida.
Es importante que la información que reciban sobre la muerte sea con lenguaje simple y claro, prepárese para que los niños sigan preguntando dónde está la persona que murió o cuándo regresa.
Los recuerdos duran para siempre
Dar mensajes claros, suavizados con la idea de que los recuerdos duran para siempre.
Los niños en edad escolar pueden entender la muerte como un evento final pero quizás no entiendan que es universal, habrá que dar a su hijo explicaciones simples y honestas sobre lo sucedido.
Pregunte a su hijo qué es lo que entiende, dedique tiempo para aclarar cualquier duda o malentendido, posiblemente necesite ayuda para encontrar las palabras correctas, brinde al menor la oportunidad de hablar de sus sentimientos.
Los adolescentes entienden la muerte al mismo nivel que los adultos pero pueden resistirse a expresar cualquier emoción al respecto, de a su hijo adolescente la oportunidad de hablar y expresar sus sentimientos.
Ayudemos a los niños sin olvidar el propio duelo, no mienta sobre la muerte, sea claro y honesto, recordemos que la pérdida es algo a lo que se enfrentará muchas veces y de diferentes maneras a lo largo de su vida (separaciones, cambio de escuelas, pérdida de amistades, etc.).
No se puede evitar su dolor
Con todo el amor que sientes le estarás ayudando a mermar su capacidad para adaptarse a la adversidad, explicar que el dolor es inevitable será lo mejor.
Gracias a estos acontecimientos logramos conocer una parte de nosotros que estaba oculta, que a su vez nos permite descubrir nuestra fortaleza, lo cual ayudará a ser personas sensibles, sanas y fuertes.
Por Susy Ramírez
Especialista en terapia de arte