Tijuana, Baja California, 9 de septiembre de 2024.- La contaminación del aire se ha consolidado como una de las mayores amenazas para la salud pública, afectando a millones de personas en todo el mundo. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año, aproximadamente siete millones de personas fallecen debido a la exposición a partículas finas contenidas en el aire contaminado. En Baja California, la situación no es distinta, ya que recientemente se han emitido alertas atmosféricas debido a la mala calidad del aire.
José Carmelo Zavala Álvarez, director del Centro de Innovación y Gestión Ambiental México (CIGAMX), destacó que la principal fuente de contaminación en la región proviene del parque vehicular. Zavala sugirió que se debe contar con una red de monitoreo de calidad del aire más amplia y eficiente para medir adecuadamente los niveles de contaminación, y así poder implementar acciones contundentes. “Es imperativo reducir las fuentes contaminantes, y el primer paso es entender mejor la magnitud del problema”, señaló.
Entre las propuestas para mitigar el impacto de la contaminación, Zavala mencionó la necesidad de implementar un plan de mantenimiento obligatorio para las flotillas vehiculares, muchas de las cuales son obsoletas y se encuentran en mal estado mecánico. Además, recordó que más de 400 mil vehículos ingresaron al estado mediante el Decreto de Regularización de Autos Usados de Procedencia Extranjera, muchos de ellos sin cumplir con las normas de emisiones permitidas.
Asimismo, Zavala Álvarez subrayó la importancia de reducir los desplazamientos largos en la ciudad mediante la planificación urbana, sugiriendo la adopción de suelos mixtos que permitirían que comercios, centros laborales y viviendas coexistan en proximidad, disminuyendo así la necesidad de movilización extensa.
En cuanto a las fuentes fijas de contaminación, el experto indicó que, si bien la industria es supervisada en sus emisiones, hay pequeños comercios, como taquerías o pollerías, que operan sin una regulación adecuada. Además, hizo un llamado a las autoridades para que faciliten el acceso a combustibles más limpios, como el gas natural o la movilidad eléctrica, y propuso la creación de parques lineales que, distribuidos estratégicamente en la ciudad, ayudarían a mitigar el ruido, mejorar el microclima y evitar las islas de calor.
La contaminación del aire es un problema que trasciende fronteras. Las cuencas aéreas compartidas entre Tijuana-San Diego, Valle Imperial y el Valle de Mexicali, según Zavala, obligan a que se tomen medidas colaborativas para mejorar la calidad del aire de la región, ya que los efectos no se limitan a un solo territorio.
Con el reciente Día Mundial del Aire Limpio y los incendios en Tecate que agravaron la calidad del aire en Tijuana, queda claro que la lucha contra la contaminación requiere un esfuerzo conjunto entre la ciudadanía, el gobierno y las empresas.